La Bruja y La Luna

No supe entender, que es lo que sientes.

Y al fin comprendí, que nunca mientes.

Con tu luna llena, con tu luna nueva, tu cuarto creciente.

Tus mares de arena consuelan las penas de los penitentes,

Y tu cara oculta, protege de culpas a los inocentes.

Las noches oscuras, fueron menos duras, con mi luna al frente.

Y viene la bruja, que está  medio loca,

saliendo del túnel, te da con la escoba.

Y viene la bruja, ni joven ni hermosa,

que te da por saco, como si tal cosa.

Nada te pedí, estabas lejos.

Pero te encontré, dándome un beso.

Aun vieja y cansada de tus rotaciones, me diste consuelo.

Lunares de plata que giran eternos, por el universo.

Y cuando un eclipse te vuelve invisible, te alivia el tormento.

Y yo sé que lloras, cuando estás a solas, en esos momentos.

Y viene la bruja, que está  medio loca,

saliendo del túnel, te da con la escoba.

Y viene la bruja, ni joven ni hermosa,

que te da por saco, como si tal cosa.

Lo que pude hacer, no te interesa.

Por mal que pensé,  nunca me dejas.

Tu cara redonda, de nácar y  rosas, aleja  tormentas.

Como hada madrina, curas las heridas, con viento y arena.

Y por la mañana, cuando llega el alba, huyes de mi vera.

Te escondes en humo, y con disimulo,  conduces mis huellas.

Y viene la bruja, que está  medio loca,

saliendo del túnel, te da con la escoba.

Y viene la bruja, ni joven ni hermosa,

que te da por saco, como si tal cosa.